Un hogar lleno de algarabía
todo, todo era alegría
porque tu guitarra sonaba
uno cantaba, otro soñaba.
Como pájaro que comió voló
con tu guitarra a cuesta
un nuevo mundo se determinó
tu música en otro lugar sonó.
El tiempo pasó
te fuiste a otro lugar
a cantar, a tocar
a tu sueño realizar.
Te hiciste hombre
a la vida enfrentaste
pero a la mujer que amaste
la dejaste, la olvidaste.
Ella siempre te espera
porque por ti daría la vida entera
con la simple satisfacción
de escuchar tu voz, tu canción
Miriam Inés Bocchio
Argentina
Respostas
Gracias María Iraci Leal por pasar por mi poema y destacarlo.
Es un poema real,pues hace años mi hijo se fue al exterior con la música y nunca me llamaba.De ahí nacieron estas sentidas letras.
Cariños de Inesita